sábado, 14 de septiembre de 2019

Los “suicidios” en las estaciones policía, son homicidios


Cuando se tiene 31 años, dos hijas y se es madre cabeza de hogar, uno no se suicida y ¡menos en una estación de policía!
El primero de septiembre Viviana Chavarro se encontraba departiendo con unos familiares en una tienda; después de una semana de trabajo, tomarse unas cervezas, a veces bailar y echar cháchara es una forma de esparcimiento del pueblo trabajador.
Pero lo que no sabía Viviana era que se iba a encontrar con la muerte, por el simple hecho de protestar, ofuscarse e incluso oponerse a un arresto por parte de los policías que llegaron porque se había presentado un gresca.
Desafortunadamente a veces ese ambiente conlleva a que se presenten riñas que se pueden convertir en tragedias, pero se supone que la fuerza pública está para impedirlo y no para que termine una joven colgada al interior de una estación de policía.
La prensa burguesa reportó que había sido un suicidio y medicina legal dio el dictamen de que efectivamente Viviana Chavarro se ahorcó con un cordón; no reportan que haya sido golpeada, pero su familia y la población del municipio de Oporapa Huila saben que eso es mentira, a Viviana la mataron los policías en un exceso de utilización de fuerza.
Inmediatamente se conocieron las imágenes del cordón azul con el cual supuestamente se había ahorcado, la familia denunció que ella ese día tenía puestas unas sandalias de cuero, por tanto no podía tener ese cordón; un vecino que vive cerca a la estación, escuchó que ella les gritaba que no le pegaran más; los familiares que estaban en la misma estación, dicen que a Viviana la dejaron en una celda sola y, a ellos les pegaron y no saben cómo el cordón de uno de ellos no estaba.
Existen demasiadas inconsistencias, es por eso que el municipio salió a marchar denunciando el hecho, y esperando los resultados de Medicina Legal; cuando se enteraron del dictamen, la familia quedó desconsolada exigiendo un nuevo examen; pero es claro que existe una confabulación entre los policías y la institución.
Y también es claro que en el seno de la fuerza pública, policía, ejército, fuerzas especiales como el Esmad y etc., existe una política de ensañamiento y represión con todo aquel que se oponga a los procedimientos “legales”; no les importa si los graban, pues modifican las escenas del crimen y tergiversan los hechos; porque están claramente respaldados por el Estado capitalista y en particular por este gobierno mafioso, en el que ser delincuente paga.
La práctica de la brutalidad policial y de hacer pasar asesinatos como suicidios se volvió muy común; en abril de este año se conoció otro caso en el municipio de Ansermanuevo, norte del Valle del Cauca con el campesino Ricardo Mazo Giraldo, que en hechos parecidos a los de Viviana fue apresado y luego reportado como muerto por “suicidio”, en este caso Medicina Legal sí confirmó que el hombre había sido golpeado y que la causa de la muerte no había sido ahorcamiento como dijeron los policías.
La fuerza pública es un claro ejemplo, de que el Estado es una máquina de opresión al servicio de los ricos, para someter al pueblo; así diga lo que diga en el papel de la constitución política, en la práctica ¡al pueblo nunca le toca! Nunca le toca la justicia, ni el buen trato, ni los beneficios, solo le toca el sacrifico, la represión y la muerte a manos de quienes dicen defenderlo. Los burgueses lo han planteado abiertamente a través de sus más cavernarios representantes: el “Ejército no es una dama rosada, sino una fuerza letal para matar” y para el pueblo debe quedar clara esta verdad; puesto que de acuerdo a la fuerza que empleen los opresores debe corresponder la de los oprimidos.

Mensaje de despedida

Gracias a todos nuestros seguidores por su apoyo. Desde mañana sumamos esfuerzos con los compañeros de Revolución Obrera (@mlm_red) Visiten ...